Vicente Javier-F

GRACIAS POR ENTRAR EN ESTE TROCITO DE MUNDO PARTICULAR, POR AYUDARME A BUSCAR ESE MOMENTO DE PLACIDEZ. A VECES NOS LLEGA SINTIENDO LO BELLO, LO SUAVE Y SERENO. LO MISMO TE OCURREN LOS SALTOS DE ASOMBRO. LA VISTA LO APRECIA Y LO BUSCA INCESANTE.







GRACIAS DE NUEVO AL LEER LO QUE ESCRIBO. LO MISMO OS DIGO POR VER LO QUE VI.







sábado, 16 de noviembre de 2013

LAS NOCHES

Las noches duermen -igualmente- sus cansancios
y sus cuitas derretidas al arrullo del silencio.
Duermen a la luz de las estrellas que les clavan
sus miradas. Y las lunas se pasean
cual mascotas trasnochadas. Las noches duermen
por las noches, cuando van rumbo a los días.
También lloran en los sueños que no habitan.
Las noches sueñan a escondidas, no desean que
tú sepas que descuidan su vigía
y que el mundo queda encima
de las ascuas de los días.

Vicente Javier-F

sábado, 9 de noviembre de 2013

QUÉ NOCHE ETERNA

Qué oscuridad sin luna que la
reviente. Qué noche eterna
sin saberlo.

Mandarinas en las nubes de los
sueños.

Un desfilar de velas se pasea
por el velo de la noche
y una carcoma insomne
nos carcome los dibujos de la
aurora, que perece cada noche
por amores que le crecen
desde el este y ya no
asoman.

¿Dónde sus brillos posan?

Nido oscuro este vacío.
Qué sinsentido inmenso haber nacido
con los soles del estío.
Qué desafío al viento
no poder ver los
momentos.

Vicente Javier-F

jueves, 31 de octubre de 2013

LAS NOCHES LARGAS

Muchas veces nos heríamos a abrazos
en las noches largas del otoño recordando
aquellas noches aún más largas
todavía, y al notar esa negrura permanente
cuando el sol era cazado en la celada,
pues la noche lo encerraba
en sus extremos al mirarse
toda ella en sus espejos,
entonces, los abrazos chispeaban
nuestro fuego diminuto,
y ya sin sol en los momentos del
cobijo, yo limpiaba aquel reguero
de saladas aguas muertas
que tus pómulos rendían.
Y seguían los abrazos bajo el manto
gris dichoso, pues las chispas no morían,
aunque el cielo era un zapato en nuestras
sienes.

Vicente Javier-F

sábado, 26 de octubre de 2013

ESCRIBO Y DIGO

Plasmo
lo que
digo y digo
mas esto
que mal digo
ha quedado
dicho,
fieramente;
ha quedado
dicho,
eternamente.

Tengo la impresión
confusa
de que todo
lo plasmado
una vez y otra
lo digo.
¡Qué borrico!

Siempre el mismo
hilo de una voz
torcida
sobre los
renglones
de la misma
herida.

Siempre el
mismo
tono, sin
formar
siquiera,
y yo ni
siquiera
veo lo que
digo.
Pero no he
sabido
conformar
el giro.

Parece que
siempre
piso el
mismo
instante
de la
misma
historia.
No tengo
un buen
guante.

Vicente Javier-F

viernes, 25 de octubre de 2013

DENTRO DE UN TIEMPO AZULADO

Dentro de un tiempo finito
yo seré una noche plena
y veré ese rumbo eterno
sobre el negro sin sentir.

Dentro de un tiempo sin otro
no seré sino un despojo.

Cómo vienes -me pregunto-
de esa hora tan cansada,
de ese límite que roba
de un soplo todas las horas.
Cómo vienes, aun en sueños.

Sin embargo...

Dentro de un tiempo azulado
sudaré sueños de sombras;
soñaré sombras a solas.

Un lento rumor acuoso ya resuena
por las venas; un lento sonar sin fuerzas
que sin quererlo recuerda
a ese útero imposible
al que no regresaré.

Cualquier día ya sin tiempo
saldrá el llanto disecado
de aquel día de la luz.

Cualquier día, dentro de algo,
cualquier día, cuerpo adentro,
ya me cesarán los días,
ya me engullirán las sombras.

Hay algo que nos devora
desde el grito en
nuestra aurora.


Vicente Javier-F

domingo, 6 de octubre de 2013

AHORA LOS DÍAS

Ahora los días escupen sorpresas
que hieren el tono de espera.
Ahora lo sueño, de día.

Las lunas vendían sus noches
tranquilas a cambio de gotas
de melancolía.
Los días perdían memoria
trocada por sombras
y estrías. Los días.

La noche llegaba a hurtadillas
sabiéndose dueña del tiempo,
dueña del día,
pues sabe aguardar en las sombras
sintiéndose eterna.
Color berenjena. Su manto
se extiende en las penas.

Vicente Javier-F

martes, 10 de septiembre de 2013

SOMOS DESPOJOS

Somos despojos de la luna herida.
Acaso seamos destello del fulgor acuoso
de una lágrima nimia.

Vicente Javier-F

sábado, 13 de julio de 2013

ESTÍO DE OLVIDO

Hoy le veo los vestidos al estío
y son de olvido.
Son de olvido las texturas del incendio
entumecido.
Son de oro los recuerdos y se
abrasan pues el tiempo enternecido
se me duerme entre las ascuas
lentamente y pensativo.

¿Qué ha quedado de los oros y los brillos
de aquel tiempo siempre eterno
que soñaba en un mañana largo y tierno,
en un mañana quedo y lento?

Esos hilos de oro pulcro se han tejido
enmarañados en un paño con urdimbre
en el olvido.
No despiertes al estío vengativo
que te envuelve las espigas en un tono
casi amigo.

Hoy es día de vestidos con olvido.
¿Tú recuerdas los estíos siempre unidos
al clamor de las pisadas por los suelos
sin señuelos?
¿Tú recuerdas los olvidos de otros
tiempos sin clamores?
¡Cómo rugen los instantes al perder
polvos secantes de las hebras
que ahora arden lentamente!
¡Cómo queda el tiempo eterno disecado
entre las manos que lo asieron!

Vicente Javier-F

martes, 19 de marzo de 2013

SORBO ENTRE LOS PRADOS

Busco rayos que se arrastren desde el Sol
hasta el templo del calor. Quiero copos de algodones
que abandonen los relieves de los campos
por llegar hasta mi flor.

Llevan tiempo aquí a mi lado las espadas de los hielos
apuntando firmemente al esplendor.
Llevo un tiempo refugiado en los castillos y en sus sombras
por si acaso allí en los muros, tan recónditos y adustos,
el invierno ya pelado pierde fuerza en sus intentos depravados.

Yo no veo aún el rayo que simule agazapado
la ilusión del cielo claro. Siempre dicen que la herida
por los hielos puntiagudos se sanea en primavera
con el canto del verdor estremecido. Siempre dice
el propio campo la verdad sobre los cantos,
y el invierno canta opaco.

Ahora espero los disparos de los cantos bien hallados,
y es que abril cantará claro cuando el chopo brote ufano
y los charcos sean su sorbo entre los prados.

Vicente Javier-F

domingo, 17 de marzo de 2013

POR LOS SURCOS DE TUS SUEÑOS


He caminado un rato por los surcos de tus sueños
entre lienzos de algodones apartados y he creído
sumergirme en los colores y en los sones de las voces
disecadas.

Tú me hablabas de distancias suspendidas entre el soplo de tu vida
y el afán de mi agonía enfurecida. Yo seguía por los surcos de tus sueños
sin las sábanas de otoño y no hallaba la distancia sin medida.
Tú me hablabas. Tú decías. Yo soñaba y la distancia ya era nada.
Yo soñaba y es tu sueño el que yo amaba.

Yo te amaba mas las voces de los sueños se secaban.
Y he creído que soñaba y he creído que te amaba...
Y he guardado la distancia acostumbrada.
Y era larga y largo el fuego de los sueños
que alumbraba mil colores sin quemar nuestras acciones.

Hubo surcos por tus sueños y hubo sueños que surcaron
otros sueños derramados por las sábanas de al lado.
Hubo un sueño en el ayer que no soñé.

Vicente Javier-F

domingo, 3 de marzo de 2013

Y VENDRÁN LOS CÁNDIDOS CLAMORES

Y vendrán los cándidos clamores
y hallarán perdidas nuestras vidas.
Y vendrán los surcos de tus sienes
a mis ojos leves a brillar,
y veré la edad de tus acciones,
el sentir obtuso de tus ansias,
desbordadas en jaurías de placer.

Y vendrán dolidas sensaciones
en clamor agudo de tu ser,
y hallarán el sitio oscurecido
por los duros quicios del querer.

Y vendrán roídas las esquinas
de las calles solas del ayer;
del verano enjuto que no fue.

Y el rumor agreste de los fríos
tronará insistente en los vacíos
de la luz que fue y que ya no es.

Vicente Javier-F

sábado, 9 de febrero de 2013

ALMA EN ESPERA

He ido a dormir al lado de mi almohada.
No me ha dicho nada.
(Nadie dice nada).
He ido a dormir al lado de mi alcoba.
Sigue estando sola.
He acurrucado mi cuerpo, que me asombra
y he sentido pena...
de estar sólo a mi vera
-sin penetrarme siquiera-
como sombra severa
del cuerpo que me espera,
pues siempre estoy afuera
de mi figura entera.
Y... he sentido pena
de ser sólo un cualquiera
que vive en esta tierra
buscando voz sincera.

Si acaso no hay palabra
que me sacuda el habla,
iré a decirle al alma
que siga ella en la cama,
que yo ya me fui al alba.

Vicente Javier-F