Cerrar los ojos –aunque sea por cansancio- es llorar,
aunque abras tus encantos a una nueva realidad –después-.
Cerrar los ojos es llorar,
es sentir el acabarse de los soplos –parcos-
que te da la eternidad.
Cerrar los ojos y aclarar la noche.
Llorar sabiendo que ese párpado velado
No hay comentarios:
Publicar un comentario